¡Seguimos impulsando la agricultura familiar! El Gobierno, a través del Ministerio de Desarrollo Agrario y Riego, puso a disposición las variedades ‘quinua INIA 446 Atipaq’ y ‘papa INIA 334 Llapanchispaq’, de alta calidad genética, que permitirá incrementar en un 90% la economía de más de 12 mil unidades familiares de Puno y de toda la zona sur andina del país.
Estas variedades, mejoradas genéticamente por el INIA, en la Estación Experimental Agraria Ilpa, tienen la capacidad de tolerar las principales plagas y enfermedades que afectan al cultivo, ofrecen buena adaptabilidad a tipos de clima y generan frutos con altos contenidos de proteínas, antioxidantes y vitaminas.
Estos atributos permiten que los productores puedan superar en un 80% el nivel de rendimiento de sus hectáreas, conserven la calidad del suelo agrarios debido a que reducen el uso de agroquímicos y obtengan cultivos con alta calidad y competitividad para los diferentes mercados nacionales e internacionales.
La actividad fue presidida por Jorge Ganoza Roncal, jefe del INIA, quien afirmó que estas variedades desarrollarán una agricultura más rentable. “Generamos cultivos de calidad que garanticen la seguridad alimentaria y mejoren el acceso al mercado”.
Variedades de alta calidad genética
Entre sus cualidades, la quinua INIA 446-ATIPAQ, tiene un rendimiento de 3 a 4 toneladas por hectárea, superando en un 30% a las demás variedades. Es tolerante a las principales plagas como el mildiu, soporta situaciones de estrés hídrico, es período vegetativo de 150 a 160 días y ofrece granos de buena textura y tamaño.
Además, concentra altos contenidos de aminoácidos esenciales en sus proteínas, minerales como hierro y zinc, así como niveles adecuados de antocianina, lo que le permite actuar con antioxidante y anticancerígeno. Esto la hace ideal para combatir la anemia.
Por su parte, INIA 334 Llapanchispaq es una variedad de papa que ofrece un rendimiento de 20 a 30 toneladas por hectárea, tiene altas concentraciones de hierro y zinc lo que la convierte en una variedad que contribuirá a mitigar la anemia, sobre todo en niños y mujeres gestantes. Además, sus niveles de antocianinas le dan las características antioxidante y anticancerígeno.
Así mismo, Llapanchispaq genera tubérculos con buena calidad de pulpa lo que permite generar productos derivados como refrescos, frituras, dulces, harinas, entre otros. Por su calidad genética la hace resistente a las principales plagas y enfermedades, así como tolerante a posibles efectos del cambio climático. Por todos estos atributos, esta variedad genera una rentabilidad económica de un 90%.
En el Perú, la papa constituye el principal cultivo de los productores de escasos recursos de la agricultura familiar de la región andina. En el 2019 se ha sembrado aproximadamente 244, 996 hectáreas con una producción total de más de cinco millones de toneladas (MIDAGRI, 2021).
En tanto que la quinua comprende 65,280 hectáreas de cultivos con una producción de 89,775 toneladas, conforme a registros del 2019. Las regiones más productoras de quinua son Puno (44%), Ayacucho (17.6%), Apurímac (12.6%), Arequipa (9.4%), Cusco (4.7%), Junín (3.9%), Huancavelica (2.5%), La Libertad (1.7%), Cajamarca (1.3%) y otros (2.3%).